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Si te gusta el anime (o incluso los dramas) de época, es posible que hayas visto las historias de palacio en que el Emperador tiene todo un ejército de concubinas que luchan entre ellas por hacer quedar mal a la “nueva” y quedarse con el favor del Emperador.
Pues en Ōoku: los aposentos privados, vas a ver lo mismo, pero al revés… aquí los roles se invierten y las mujeres son las que están rodeadas de hombres que utilizan para quedar embarazadas y poder “salvar a la humanidad” de una extinción segura.
La viruela roja
Para ampliar el contexto: el anime se ambienta en la época feudal, donde una plaga conocida como la viruela roja ataca a la población masculina de Japón, reduciéndola enormemente en poco tiempo, lo que obliga a las mujeres a adoptar roles que no solían tener antes y convertirse en cabezas de familia, trabajando en el campo o adoptando puestos políticos que obvio antes eran ocupados por hombres.
Tal es el caso de Chie, hija ilegítima del shogun Iemitsu, quien murió sin dejar descendientes varones, por lo que su hija ocupa su puesto haciéndose ella misma pasar por hombre para que la población no entre en pánico por ser una mujer en el puesto de un hombre.
Ante la carencia de hombres, además, las pocas familias que cuentan con varones empiezan a venderlos como prostitutos, e incluso el matrimonio se ve como un negocio ya que queda reducido a familias con dinero que puedan comprar un esposo para sus hijas. Por supuesto, la shogun en el palacio tiene a su disposición un “ejército” de hombres hermosos que puedan darle muchos hijos y que se mantienen en el Ōoku.
Puede que por ahora la trama te parezca muy simple: la típica historia (de hombres en este caso) luchando por agradarle a una mujer poderosa que puede sacarlos de la pobreza, pero Ōoku: los aposentos privados, va más allá de eso.
Con un episodio inicial de casi una hora, nos adentra en un mundo en crisis donde todo el sistema conocido por un país completo sufre un giro enorme y todos deben adaptarse para sobrevivir. Y es que la viruela roja ataca por igual a pobres y ricos, siendo solo una de las pocas preocupaciones de las personas.
En medio de la peste también continúan las disputas políticas, la hambruna y la intriga entre los altos rangos del país. Porque Ōoku no solo nos presenta la vida en palacio, abarca la vida de la gente normal y cómo enfrentan su día a día.
En resumen..
No vamos a mentir, este no es un anime para todo el mundo: en ocasiones se vuelve lento, y un capítulo inicial tan largo para un anime no es algo que agrade a muchas personas. Además, no es una historia lineal, por lo que a veces se puede perder el ritmo. Si eres una persona sensible, también es importante que sepas que tiene muchas escenas violentas y de abuso sexual.
Pero si te gustan estas historias de drama de época, posiblemente te agrade esta serie, de 10 episodios, todos disponibles en Netflix, y que esperamos tenga una segunda temporada, ya que su final deja más dudas de las que responde la primera temporada, que es como una introducción a la historia general del Ōoku y sus tradiciones.
